Marzo 2004

Abstract

EDITORIAL: En mi condición de Rector y en el comienzo de un nuevo año lectivo quiero desearle a toda la comunidad educativa del instituto, alumnos, docentes, no docentes e investigadores, que tengan un venturoso año. También quiero agradecer la buena voluntad, el trabajo, la dedicación que cada uno de Uds. puso de manifiesto en todas las actividades que se desarrollaron en el año que pasó. En toda esa actividad se evidenció un claro sentido de compromiso. Soy plenamente consciente de que esas acciones trascienden mi persona, su principal destinatario es obviamente, nuestro Instituto Universitario Aeronáutico, que como ustedes saben, lleva ya más de medio siglo trabajando por los intereses supremos de la Nación en el campo de la conquista del aire y del espacio. Estos son los cimientos históricos sobre los cuales se asienta la realidad institucional que hoy vivimos y que de ninguna manera debemos olvidar y a los que no debemos renunciar. La historia de un país la conforman y en ella se desenvuelve la vida de las instituciones. Es acierto de aquellos que nos precedieron, que con humildad y sabiduría supieron dar respuesta al momento histórico que les tocó vivir. La hora actual exige de nosotros un gesto similar al de aquellos, los tiempos son igualmente complejos, quizás han cambiado algunos escenarios, pero no son más complejos. Además cada generación ha sido preparada justamente para eso, para dar una repuesta a su tiempo, y nosotros estamos preparados. Cuando digo "nosotros" me estoy refiriendo a toda la comunidad educativa, civiles y militares, para que juntos con humildad, sabiduría y respeto a la pluralidad, podamos construir ésta, nuestra UNIVERSIDAD, la de todos. Algunas cosas deberán cambiar, es inevitable, ya que estos cambios son la respuesta necesaria para desarrollarnos en los nuevos escenarios en que nos toca actuar, y estos cambios son obviamente una clara expresión del crecimiento institucional. Nada es perfecto ni lineal y todo requiere esfuerzo, pero el desafío es tan bueno que vale la pena intentarlo, por supuesto... y les reitero el deseo inicial, un venturoso año para todos. Brig. Héctor E. Ré Rector